Bendita esta guerra con Rusia

Bendita esta guerra con Rusia

que nos permite ver la verdad

que nos permite cambiar y crecer como humanidad que nos da la oportunidad de acabar con las fronteras.

Porque son las fronteras

la causa y la excusa de todas las guerras la forma del control de la humanidad por la delincuencia que en un país roban y matan y en otro lo invierten, que en un país provocan un golpe de estado y en otro amañan las elecciones

Porque son las fronteras los límites del poder  de las bandas económico/militares, dueñas de los estados, que ejercen la violencia a su antojo sin otro respeto a los derechos humanos, que ocultarlo y negarlo.

Bendita esta guerra que puede ser la última si terminamos con las fronteras si vemos que todos los muertos son igual de humanos e igual de víctimas y que estamos gobernados por enfermos mentales que nos enferman de miedo y de mentiras cada día en todos los medios de comunicación ¡Y los degenerados, lo llaman libertad de expresión! 

Bendita esta guerra que debe de ser la última.

¿No somos demócratas?

¡Vamos a votar toda la humanidad!

¿O la ONU está solamente, como la Unión Europea, para hacer lo que mande el dueño de la OTAN, a quienes tampoco votan en su país? 

¿No es evidente que somos POR MIEDO todo el planeta siervos y vasallos del imperio que tiraron las dos bombas atómicas sobre el Japón?   

¿No es hora ya de levantarnos contra la tiranía que cada vez exige más sumisión a su propia locura DESTRUCTIVA DE LA HUMANIDAD?

¡Bendita guerra, que podemos ganar la humanidad!

¡Derechos humanos por encima y por delante de las fronteras!

Cuanto más se prolongue esta guerra, mayores serán las pérdidas para los ucranianos, para los rusos, para los europeos, para los hambrientos del sur global y para el planeta. El papa Francisco no cesa de clamar por un alto el fuego y entablar una negociación: “Las guerras no se terminan enviando armas sino buscando como alternativa las negociaciones diplomáticas”.